En las elecciones legislativas, Gustavo Orozco, el referente político respaldado por Ricardo Villada y Esteban “Tuty” Amat, logró imponerse en Rosario de la Frontera y renovar su banca como diputado provincial. El resultado fue contundente y marcó un retroceso para el oficialismo local, que apostó fuerte con su estructura y no logró el respaldo esperado en las urnas.
Con un mensaje directo y una campaña austera, Gustavo Orozco logró conectar con el electorado, que manifestó su descontento con la gestión del intendente Kuldeep Singh. A pesar de que la candidata oficialista Marianela Marinaro consiguió una banca, la derrota política fue significativa, dado que se trataba de una lista apoyada con recursos municipales y asistencia directa a los votantes.
La estrategia del oficialismo local, basada en el despliegue territorial y la entrega de bienes, no alcanzó para neutralizar el crecimiento de Orozco, quien basó su propuesta en una visión legislativa firme y crítica al modelo asistencialista. La falta de propuestas concretas desde el municipio generó un rechazo que se vio reflejado en el resultado electoral.
Tras su triunfo, Gustavo Orozco emerge como uno de los principales líderes de la oposición en el sur provincial. Su pertenencia al espacio que lideran Villada y Amat, junto a una consolidada estructura política, lo proyectan como potencial candidato a la intendencia de Rosario de la Frontera en 2027, con un camino que ya comenzó a delinear.
El escenario local se reconfigura tras estos comicios, dejando al oficialismo con la necesidad de revisar sus prioridades y formas de vinculación con la comunidad. Mientras tanto, Orozco fortalece su figura con respaldo popular y un equipo que lo acompaña desde hace varios años, con expectativas renovadas hacia una nueva etapa política.