En un procedimiento realizado en la localidad de Los Telares, Santiago del Estero, la policía incautó más de 1.300 kilos de hojas de coca que habrían salido desde la ciudad salteña de Orán. El operativo se desarrolló durante la madrugada, cuando dos camionetas intentaron eludir un control utilizando caminos rurales. Las autoridades lograron interceptar ambos vehículos y descubrieron los bultos ocultos en su interior.
En total se contabilizaron 764 paquetes distribuidos en 52 bultos, lo que representa uno de los decomisos más grandes de hojas de coca en la región. Aunque los ocupantes fueron identificados y puestos en libertad, el hecho quedó enmarcado en una causa por infracción a la Ley 22.415 de contrabando. Desde hace meses, los envíos desde el norte argentino han incrementado su volumen, lo que refuerza la hipótesis de un nuevo circuito logístico del narcotráfico.
La carga fue trasladada y puesta a disposición de la Justicia Federal, junto con los vehículos, celulares y otros elementos secuestrados. Según fuentes de Santiago del Estero, este procedimiento supera al registrado en Herrera, donde el año pasado se incautaron 771 kilos.
El volumen incautado, de más de 1.300 kilos de hojas de coca, apunta a que no se trata de distribución para el consumo tradicional. Las fuerzas especulan con la posibilidad de que estén operando laboratorios clandestinos de elaboración de pasta base en el centro o sur del país. Las características del cargamento, el perfil de los involucrados y la modalidad del transporte fortalecen esa hipótesis.
El operativo forma parte de una serie de acciones que buscan frenar el avance del narcotráfico tras la implementación del operativo Güemes y el operativo Roca. Las organizaciones estarían adaptando sus métodos, instalando “cocinas” en zonas más alejadas del norte. Esto permitiría reducir riesgos y evadir controles fronterizos.