La sede salteña de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), ubicada en la intersección de Deán Funes y avenida Belgrano, no atenderá al público durante dos días consecutivos como parte de un plan de lucha gremial. Este miércoles 9 de abril se realizará una asamblea informativa acompañada de un apagón informático entre las 9 y las 12 del mediodía, mientras que el jueves 10 se sumará al paro nacional convocado por la CGT.
Ramiro García Salado, delegado de los trabajadores de ARCA en Salta, explicó que la situación de conflicto no es nueva y tiene su origen en 2023, cuando el gobierno nacional anunció la disolución de la AFIP y el despido de más de 3.100 empleados. Si bien esa medida fue frenada por la justicia, el dirigente gremial asegura que las políticas de ajuste continúan y afectan directamente a los trabajadores del organismo.
“El gobierno avanza con una política de desmembramiento del Estado”, denunció García Salado. En ese marco, advirtió que una disposición reciente elimina 38 distritos y más de 20 receptorías en todo el país, dejando a numerosos empleados en situación de inestabilidad laboral. En la región norte, las dependencias afectadas son la receptoría de Cafayate (Salta), el distrito Concepción (Tucumán) y la receptoría de Tinogasta (Catamarca), donde un total de 20 trabajadores estarían en riesgo.
El traslado forzoso de personal del ARCA a otras localidades es, según García Salado, una forma de “despido encubierto”. “Hay compañeros que tendrán que trasladarse hasta 200 o 300 kilómetros de su lugar habitual de trabajo”, afirmó. A este panorama se suma el congelamiento de las paritarias desde febrero de 2024 y una reducción del fondo estímulo que afecta directamente el poder adquisitivo del personal.
Además, el delegado denunció que la centralización de los grandes contribuyentes en Buenos Aires responde a una estrategia de vaciamiento institucional. “Antes se usaban criterios objetivos para definir jurisdicciones. Ahora, el director de la DGI puede decidir discrecionalmente por mérito, oportunidad y conveniencia”, señaló.
Las medidas de esta semana incluyen la asamblea con apagón informático de este miércoles, la adhesión al paro general del jueves, y un plenario nacional el viernes para evaluar los próximos pasos del plan de lucha. Mientras tanto, desde el gremio alertan que la estabilidad del personal y el funcionamiento del organismo están en riesgo si no se modifican las políticas actuales